Coaches, haters y selfies

Greguerías del siglo XXI


Seguí todos los consejos de mi coach y ahora soy un feliz desgraciado.

El paciente hipocondríaco al final murió, pero sólo en su imaginación.

Las buenas costumbres duermen en una caja fuerte a la espera de ser traducidas a modas en inglés.

El niño hiperactivo provocó hipertensión en el hipermercado.

Nadie tendrá nunca más haters que el mosquito.

¿Por qué lo llaman selfie en lugar de Narcisografía?

La bolsa es el electrocardiograma del capitalismo.

En un parlamento con sentido trágico, las decisiones se tomaban por Unamunidad.

Fui al doctor por un resfriado y me recetó dejar de hablar con autotune.

Encendió su teléfono inteligente para dejar de pensar.