Eso de vaciarme la billetera mientras yo andaba gozando con Manolín en la trastienda, ¡eso no os lo perdono!
Cartas crueles
Perico BarandaLas cartas boca arribaTras errar por varias editoriales, finalmente he conseguido que La Charca Literaria se avenga a publicar la correspondencia de doña Mercedes. Es buena masa para su pastel fangoso.
Otra carta desde el convento
Perico BarandaLas cartas boca arribaYo no tenía ni idea de cuántos dientes teníamos hasta que me puse a contarlos y los conté, tocándolos con el dedo, despacito, de uno en uno. Primero los de un lado (por arriba y por abajo) y luego los del otro (por abajo y por arriba).
Merceditas en mayo
Perico BarandaLas cartas boca arribaDice Amalia, la animadora social, que las flores del campo son silvestres y que Mayo es el mes de las flores y el mes de María.
Valentina y Valentín
Perico BarandaLas cartas boca arribaTu lees en tu tablet, Valentina, y yo en mi portátil. De vez en cuando echamos una mirada al televisor, donde hablan del cometa Halley. Y así vamos haciendo tiempo hasta que llegue la hora de irnos a la cama y conciliar el sueño. El parcial y el definitivo.
Pedrito escribe a los Reyes Magos
Perico BarandaLas cartas boca arribaQueridísimos Reyes Magos: espero que -a diferencia del mismísimo Dios- me concedáis alguna de mis peticiones, sea en el plano personal o profesional, o ambos.
El Desguace en otoño
Perico BarandaLas cartas boca arribaAsí son nuestras cojitas: tiernas y abiertas al arrumaco, como pastelitos de crema.
Contra Carcagente
Perico BarandaLas cartas boca arribaAbofeteada y en el suelo, perdí el oremus. Fueron unos segundos; tiempo suficiente para que aparecieras tú y me robaras el anillo.
Una carta de Manolín
Perico BarandaLas cartas boca arribaDe momento me estoy tomando las pastillas de la bipolaridad y unas gotas que me quitan las ganas de zurrarte, pero si es preciso me las puedo dejar de tomar y romperte la cara en una esquina, ¿estamos, gordito?