Quinto canto a la savia*

Susurros a bocajarro



Este trocito tuyo que yo tengo

este color de sangre, esta moldura

quise arrancarlo entonces. Tú lo sabes.


Este trocito tuyo que yo tengo

cura la herida y duele y sabe siempre

que nunca es solo mía la amargura. 


Este trocito tuyo que yo tengo

lo busco a veces dentro de otro cuerpo,

en un ruido de risa, en unas manos,

en un aroma ronco, en una voz,

en un “mi niña”, un “quieta”,

y no lo encuentro.


Este trocito tuyo que yo tengo

lo llevo ahora al aire, que lo vean.

Que sepan que de ti soy.

Que te tengo. 

____________________________________________________________

*Del número VII de la plaquette Rue Vaneau: Cinco cantos a la savia.