Microrrelato de la corrupción

Perplejos en la ciudad




Cuenta la leyenda que en aquel lugar había tanta corrupción, que se pasaban el día conjurando unos contra otros, y las autoridades del lugar sólo salían a escondidas, por la noche, para financiarse multando a las prostitutas y a los clientes en que habían convertido a los habitantes del lugar. Todos, súbditos de la corrupción.

Hasta que un día la tierra se abrió y todos sus habitantes desaparecieron en las profundidades del abismo.

Cuenta la leyenda que mientras se precipitaban al abismo, las autoridades aún aprovecharon el tiempo para colocarse en el mejor lugar de la caída.

Imagen @najimirar