Entonces ocurrió un prodigio: era un hombre de no más de metro y medio.
El olor de la nostalgia
Felipe SérvuloCrónicas mínimasAlgo cotidiano puede convertirse en un instante mágico.
Burial Mound
Felipe SérvuloCrónicas mínimasUn montículo cubierto de hierba, tierra y sencilla hierba, alberga mucha desolación, pues conviven allí una belleza primigenia y una tristeza atávica.
Mi nombre está en Marte
Felipe SérvuloCrónicas mínimas¿Qué tendrá Marte que tanto nos fascina desde tiempos inmemoriales?
El muro se humaniza
Felipe SérvuloCrónicas mínimasEl otoño evoca lo efímero de la vida.
La Dona Morta y otros arcanos
Felipe SérvuloCrónicas mínimasLas inopinadas consecuencias de las vacunas.
Fideuá y canciones camino del colegio
Felipe SérvuloCrónicas mínimasLas niña tararean o emiten sonidos guturales. Me recuerdan cantos étnicos lejanos, no sabría decir de dónde.
Ce que vivent les violettes
Felipe SérvuloCrónicas mínimasTenían que ser enterrados en la playa con los pies hacia adelante y la cabeza hacia el mar.
Juanín
Felipe SérvuloCrónicas mínimasAl pequeño Juanín se lo llevó una simple diarrea veraniega, que lo deshidrató y le produjo la muerte.