A mi amigo Manuel Mateos Hidalgo
Una copa de vino de Borgoña.
La luz escancia en ella al mediodía
cárdenas pinceladas velazqueñas.
Paladeo sus pétalos, sus labios.
Y miro el mar. Sus visos destellando.
En el arco del cielo un sol de otoño
campeador se da un baño en mi copa.
Doy otro sorbo y guiño en tanto a Baco.
El bouquet del borgoña, sus matices.
Y brindo por la vida y sus racimos.
Terciopelo del vino en la mirada.
Las personas que amé. Las que me amaron.
Tiento final como un último beso
a la vida, a una mujer amada.
Las rosas del borgoña por mis venas.
Labios, pétalos, rosas… Otoñezco.