Rebajas de Navidad

Perplejos en la ciudad

 

Encuentro en el buzón el catálogo navideño de la empresa «Consuma y Regale a gusto», felicitando las fiestas. Viene ilustrado con todos sus productos y un árbol de Navidad, con las ramas calcinadas y un fondo gris de estrellas apagadas, con el siguiente texto al dorso, en letra minúscula de color azul:

Consuma y Regale a gusto

Levante el ánimo y no sea como las ramas de este árbol de Navidad, calcinadas. Recortes y rebajas especiales para estas fiestas, ¡precios y descuentos de muerte, incomparables!, para la vida navideña de todos los públicos y edades. Para usted.

Lo rebajamos todo, todo, excepto lo que aumenta. Visítenos, no tenga miedo al absurdo, a la paradoja, sea moderno y acepte las contradicciones de la vida: todo se recorta en nuestras grandes superficies y supermercados. Todo, absolutamente todo, salvo lo que se encarece según la evolución natural de la oferta y la demanda de las cosas de la vida, que no es ni buena ni mala –la vida, queremos decir–, sino todo lo contrario, aunque el razonamiento pueda parecer ilógico y sospechoso a primera vista.

¿Que no se acaba de entender qué es lo rebajado, y qué lo no rebajado? No se preocupe, tenga fe y confíe, como confía en la Lotería Nacional: todo baja y se rebaja, ¿lo entiende?, baja y se rebaja…, a no ser, claro está, que suba un poco y un poco más, y crezca y crezca, pero lo demás, recuérdelo, se rebaja, se recorta, se congela y se vuelve a rebajar, a semejanza –lo decimos para que tenga una visión más clara–, de lo que acontece en el submundo de los derechos, los salarios y las pensiones. ¿Que le gustaría que todo lo que le ofrecemos se rebajara aún más, si cabe? Lo estudiaremos y sin duda daremos cumplida satisfacción a su afán por las rebajas.

¿Que ustedes tienen adquiridos ciertos derechos por haber nacido, según les informan con cierta precipitación unas cartas magnas sin destinatario, derechos que no se cumplen a menudo en la vida real? Por supuesto, y no seremos nosotros quienes neguemos tal evidencia. ¿Que un día les recortarán el cuerpo y quizá también el alma? Tampoco exageremos tanto, ya verán, todo tiene arreglo, y está escrito: el derecho al trabajo (que no tienes, pero no importa), el derecho a la vivienda (que no es ni será tuya, pero no te preocupes), y en cuanto al derecho al desastre, todo es relativo, ya lo dice la ciencia.

¿Que el derecho al desastre es el más respetado de todos los derechos? Bueno, mejor esto que nada, las rebajas son muy seductoras, pero todo lo atractivo y seductor tiene sus riesgos. Sí, sí, ya lo sabemos: todo está rebajado, menos lo que necesitas, vale, no vamos a discutir ahora las ventajas y desventajas de las rebajas (que incluso rima en “ajas”, que no es femenino de “ajos”).

Pero, no lo olvides (permita que le tuteemos, querido cliente y ya sin duda caro amigo), será tu propio desastre, diseñado para ti y adquirido mediante descuento: derecho al desastre, de cabeza, tuyo y todo tuyo, derecho exclusivamente ideado y garantizado para ti, para que disfrutes de estas fiestas. Una Navidad de solo uso personal, de diseño único e intransferible, con todo tipo de rebajas, recortes, descuentos y garantías. En definitiva, y para no alargar más las rebajas: derecho garantizado al desastre, personal, absolutamente hecho a tu medida.

Si solicitas la compra de uno o dos desastres, personalizados, te adjuntaremos una participación de lotería navideña.

Consuma y Regale a gusto

les desea Felices Fiestas y Próspero Año Nuevo 2017