El templo de Delfos tiene dos frontones, en el de occidente está representado Apolo y en el frontón de oriente está representado Dionisos.
Mirando el amanecer, mirando hacia al este, por donde sale el sol, el orden y la mesura, lo apolíneo.
Y mirando el ocaso, mirando al oeste, por donde se pone el sol, el arrebato, lo dionisíaco.
Dentro del templo, entre los dos frontones, entre en orden y el caos: la belleza.
Y en las paredes del templo, en su interior, grabado en los mármoles arcaicos las inscripciones siguientes:
Lo más exacto es lo más bello
Respeta los límites
Odia lo híbrido
De nada demasiado
Hoy, el templo de Delfos se encuentra en ruinas. Sobre las piedras caídas, las lagartijas toman el sol.