En casa de Noelia hay una jamba
que tiene muescas numeradas. Marcas
que suben cada año,
son siempre de ayer
y anuncian siempre
más para mañana. En mi casa
no.
En mi casa hay un futuro en la garganta de mi padre.
Una orden y una promesa.
Y todo lo que será está guardado en la garganta de mi padre.
En una orden y una promesa.
En casa de Noelia hay victorias en el por fuera de las puertas.
En mi casa hay una carrera que pierdo siempre.
En mi casa hay una paciencia que pierdo siempre
en las muescas hondísimas
de la garganta de mi padre.
Collage de Julia Malkova